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Síndrome braquicéfalico en perros 

Por: Tatiana Gómez Orejuela  

El síndrome braquicefálico se da en diferentes razas y es un conjunto de signos en el tracto respiratorio que los hace propensos a obstrucciones debido a la forma de su cabeza, su hocico y su garganta. Los perros afectados con mayor frecuencia son los de las razas braquicéfalas que significa de cabeza corta.  

El médico veterinario Edgar Castro de la Unidad médica de la costa de la ciudad de Cartagena habló con nosotros para saber porque se presenta este síndrome, que razas son las más propensas, los signos de alarma y algunas recomendaciones que se pueden llevar a cabo como tutores responsables.  

Las razas braquicefálicas 

Estas son algunas de las razas de perros que pueden presentar este síndrome:  

  • Pug 
  • Bulldog inglés  
  • Bulldog francés  
  • Pequines  
  • Shar Pei 
  • Shih Tzu 

Estas razas pueden ser más propensas a presentar el síndrome, pero debemos estar pendientes de nuestro perro indiferentemente su raza ya que pueden presentar alguna obstrucción respiratoria. Esto se debe a que las alas laterales de la nariz están cerradas y el paladar elongado, los sacos aéreos cambian de posición y por esto se presentan obstrucciones o problemas respiratorios.  

Signos de alarma 

Estos son algunos signos que podemos identificar en nuestros perros para saber que algo no está bien con ellos y que debemos acudir al veterinario. 

  • Se rehúsa a hacer ejercicio.  
  • Ronquidos fuertes. 
  • Dificultad para respirar, sea respiración fuerte o que tiende a ahogarse.  
  • Ronquidos al respirar estando en reposo.  
  • Desmayo o pérdida temporal y súbita de la conciencia.  

Recomendaciones 

Si tienes un perro braquiocefálico lo mejor es que siempre revises sus ronquidos y su tracto respiratorio para saber que todo está bien.  

  • Usar arnés en lugar de collar. Así evitas daños en el cuello o alteraciones en la tráquea.  
  • Facilitarles un hábitat con temperaturas suaves. Ya que por los problemas respiratorios pueden tener mala termorregulación.  
  • Mantener los orificios nasales siempre limpios. 
  • Cuando les damos alimento debemos estar pendientes para que no se atraganten. Se pueden utilizar comederos anti atoro para que coman más pausado.  
  • Limitar el ejercicio intenso y en horas de temperaturas elevadas es mejor realizar paseos cortos.  
  • Controlar el peso. La obesidad condiciona y agrava otras enfermedades, como las patologías respiratorias.  
  • Controles periódicos en el veterinario: estas razas son pacientes crónicos así que lo mejor es ser recurrente.  

Hay palabras que nos cambian la vida,  pero hay ladridos que nos cambian el alma

Jean Lacroix 

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